9 Consejos para saber Cómo Educar a un Cachorro
Educar a un cachorro es una tarea larga que requiere dedicación, paciencia y tiempo. Al final, cada animal tiene su propio carácter, sus necesidades y su capacidad de aprendizaje, e igualmente la raza también supone un factor diferenciador entre unos y otros, por lo que el proceso nunca es el mismo para todos, como en el caso de las personas.
Y aunque existen cursos de educación canina para cachorros con profesionales especializados en facilitar la tarea, es necesario tener unos conocimientos previos para comenzar con ciertas pautas y empezar a educar a un cachorro desde al menos los 2 o 3 meses de vida, y conseguir unos resultados básicos desde el principio. Vamos a conocerlas a continuación. empezar a educar a un cachorro
Cómo enseñar a un cachorro
Para poder enseñar y saber cómo tratar a un cachorro para que aprenda a comportarse, te mostramos que cosas puedes enseñarle para que se comporte bien tanto dentro como fuera de casa, tanto para educar a un perro de un mes como para saber como educar a un cachorro de 2 meses.
Hacer sus necesidades en el lugar adecuado
Cuando los cachorros han recibido todas las vacunas, ya pueden salir a la calle a dar paseos y, por tanto, deben aprender a hacer sus necesidades fuera.
Lo primero que hay que hacer es crear una rutina y sacarle, al menos, 3 veces al día. Hay que tener paciencia, pues al principio la calle le puede dar miedo o abrumarle. Cuando lo consiga, felicítale y dale un premio. Tener una recompensa le hará saber que lo hace bien y lo querrá repetir.
Quedarse solo en casa
Seguramente no puedas cuidar las 24 horas del día con tu cachorro, así que debe aprender a estar solo en casa sin sufrir, sin ponerse nervioso y portándose bien.
El proceso debe ser gradual, comenzando por ratos cortos y siempre en momentos positivos, nada de tensión que se le pueda trasmitir. Poco a poco ese tiempo se puede ir aumentando hasta conseguir el tiempo necesario. De esta manera, se evita la ansiedad por separación.
No pedir comida en la mesa
Para que un cachorro no se acerque a la mesa mientras las personas comen para pedir su ración, lo principal es no darle comida nunca en estas situaciones. Si se hace una vez siempre querrá repetir y no hay que consentir que se lo tome como un premio.
De hecho, si esta actitud se repite, molesta, se pone pesado, agresivo o nervioso, hay que regañarle y decirle que no con una voz firme.
No tirar de la correa
El paseo es un ritual entre el dueño y la mascota, no solo es el medio para que el cachorro haga sus necesidades. Durante la salida, la mascota explora, juega… especialmente cuando es pequeña. Y por eso es importante poder mantener el control para que no crezca tirando de la correa.
Para ello, es esencial usar collar y no arnés (con este al tirar se levantan) y una correa fija en vez de extensible. De esta manera, podrás mantenerlo a tu lado, dirigirle directamente la cabeza con suaves movimientos y cuando sea adulto no tirará.
Aprender a no morder
Los cachorros muerden cuando juegan porque descubren el mundo a través de su nariz y su boca. Al principio no hacen daño, pero si se acostumbran, de adultos pueden provocar muchos problemas.
Para que el cachorro aprenda a no morder primero hay que darle juguetes con los que pueda desfogarse, así aprende a que solo puede hacerlo con esos objetos. Cuando muerda algo que no debe, hay que hacérselo saber con voz y actitud firme, hay que regañar al cachorro
Aprender a dormir en su sitio
Lo primero que hay que hacer es averiguar dónde le gusta dormir. A algunos perros les gusta descansar escondidos debajo de algo, otros prefieren un lugar despejado, etc. Así, podremos habilitar un lugar con sus gustos.
Después, hay que acompañarle hasta su cama y hacer que quiera estar allí con juguetes u objetos que le gusten. Si se duerme en otro sitio, se le puede llevar para que se de cuenta cuando se despierte y transmitirles esta disciplina. No es aconsejable dejarles dormir en la cama durante su etapa inicial porque se acostumbrarán y luego no querrán ir a su sitio.
Socialización
Es importante que un cachorro socialice para que en su etapa adulta lo haga correctamente y sea equilibrado. Para ello hay que practicar, hay que pasear entre personas, coches, perros, niños… Eso sí, siempre de forma cauta pero sin miedo, observando el comportamiento de otros perros y juntándole con mascotas con buen comportamiento a las que pueda imitar.
Cómo adiestrar a un cachorro
Teniendo claras las cosas básicas como sus necesidades o la socialización, hay que adiestrar a un cachorro para que obedezca por la seguridad de todos. Para disciplinar a un cachorro, se debe entrenar al perro para entender órdenes básicas como sentarse, tumbarse, responder a su nombre, quedarse quieto, etc.
Esto se trabaja por repetición y con recompensas, el refuerzo positivo. Hay que insistir en las peticiones una y otra vez con paciencia y buenas formas. Cuando lo haga bien: premio. Repetir constantemente el entrenamiento para que forme parte de su comportamiento innato.
Cómo y cuánto tiempo pasear un cachorro
Tanto los cachorros como las mascotas adultas necesitan pasear 2 o 3 veces al día. Primero por una cuestión de salud física, necesitan hacer sus necesidades y practicar algo de ejercicio. Segundo por su salud mental, necesitan relacionarse, inspeccionar el entorno, ver mundo. Por eso es importante establecer rutinas de frecuencia y horarios desde que comenzamos a criar al cachorro, así se acostumbrará a tus necesidades.
El tiempo también depende de las necesidades de ambos y del tiempo disponible. Los paseos cortos por la mañana son muy útiles y los paseos largos cuando se pueda son la mejor opción para jugar y liberar adrenalina. El carácter del cachorro es fundamental.
Cómo enseñar a un cachorro a venir cuando le llamas
Como todas las órdenes, el hecho de que el cachorro responda a su nombre es cuestión de práctica. Hay que elegir un nombre (no muy largo, a ser posible) y empezar a llamarlo desde distancias cortas para luego ir aumentándolas.
De nuevo, el refuerzo positivo es muy efectivo y cuando haga caso conviene premiar esa actitud. Con practicar unos 10 minutos al día es más que suficiente.